Se entiende por bioeconomía el uso de recursos biológicos renovables (biomasa) procedentes de la tierra y el mar para producir alimentos, materiales y energía.
La bioeconomía circular, que promueve un uso sostenible de la biomasa, tiene un claro potencial para abordar algunos de los principales retos actuales de la humanidad, como el cambio climático, la seguridad energética y la seguridad alimentaria. Asimismo, la bioeconomía circular puede contribuir a aumentar la competitividad, la sostenibilidad y la resiliencia del sector agroalimentario.